domingo, 5 de noviembre de 2000

La Fidelidad: El Camino a Seguir


"Ahora bien, se requiere de los administradores que cada uno sea hallado fiel." (I Corintios 4:2)

"Porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá." (Lucas 12:48)

¿Sabía que usted es un mayordomo cristiano? Pero, ¿Qué implicación puede tener eso para su vida?

La afirmación del Señor en el pasaje de Lucas 12 presenta un desafío que puede significar la victoria o la derrota espiritual del hombre a los ojos del Dios, en la administración de las bendiciones que él ha dado.

Durante este mes estudiaremos cuidadosamente lo que la Biblia nos enseña a cerca de la mayordomía cristiana. Por eso, no se pierda estos estudios que le darán las claves espirituales para llevar una vida de fidelidad y de victoria en Cristo ¡Lo esperamos!

(05/nov/2.000)

Todos Debemos Ofrendar lo Mejor para el Señor


"Honra a Jehová con tus bienes y con las primicias de todos tus frutos" (Proverbios 3:9)

El diccionario define "honrar" así: "tener en alta estima a una persona o enaltecer su méritos". Pero en este Mes de la Mayordomía veremos que no se trata de cualquier persona; se trata nada menos que de Dios, dueño de todo, el Señor y Soberano de la creación, por quien todas las cosas son y tienen existencia.

En la Biblia, entre los testimonios de hombres y mujeres que honraron su nombre está el ejemplo de Abel:

"Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró con agrado Jehova a Abel y a su ofrenda." (Génesis 4:4)

Otra es la ofrenda de la viuda de quien dijo Jesús: "... De cierto, de cierto, os digo que esta viuda pobre echó más que todos los que han echado en el arca; porque todos han echado de lo que les sobraba; pero, esta, en su pobreza echó todo lo que tenía" (Marcos 12:43-44)

Podemos honrar al Señor con nuestras vidas dedicadas a su servicio, con nuestro tiempo utilizado en su obra, y con nuestras ofrendas dadas con gratitud y gozo en respuesta de una fe viva en Jesucristo.

Reflexiona con cuidado en el mensaje de este día y en los estudios de las próximas semanas, para que puedas aprovechar las herramientas espirituales que te permitirán, con la ayuda de Dios, ser un mayordomo digno y fiel de los bienes que él te ha dado.

(05/nov/2.000)